NUÉVALOS Busco en internet información sobre Nuévalos, con el fin de saciar la inquietante curiosidad que se despertó en mí recorriendo las viejas calles del pueblo. ¿Qué es lo que ha pasado en este pueblo para que un feísmo tan fuera de lugar haya invadido las calles de su sector más antiguo, que son las que abrazan su plaza y su ayuntamiento? No queda la cosa en un par de hileras de adosados ochenteros, más allá de la plaza vuelve …
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NUÉVALOS
Busco en internet información sobre Nuévalos, con el fin de saciar la inquietante curiosidad que se despertó en mí recorriendo las viejas calles del pueblo. ¿Qué es lo que ha pasado en este pueblo para que un feísmo tan fuera de lugar haya invadido las calles de su sector más antiguo, que son las que abrazan su plaza y su ayuntamiento? No queda la cosa en un par de hileras de adosados ochenteros, más allá de la plaza vuelve a aparecer la misma arquitectura, el mismo horror integrado con calzador en un entorno maravilloso de geología exuberante, adornado por la presencia del Pantano de la Tranquera. No alcanzo a entender que alguien haya autorizado tal dislate llevado, seguramente, por alguna mala entendida idea del progreso que, en todo caso, no tiene porqué verse reñida con la historia y la tradición. En Nuévalos, nadie supo ponerle freno. Más allá de la ignominia, el nombre de Nuévalos ha alcanzado gran fama dentro y fuera de Aragón por albergar en su término el Monasterio de Piedra, uno de los principales atractivos turísticos de la región aragonesa. En la parte baja del casco urbano se hace notoria la influencia de dicha presencia, así como de las aguas del pantano, que ejercen de catalizadores de la actividad turística. Comercios, hoteles y restaurantes jalonan la carretera que conduce a Alhama y a Calatayud, capital comarcal. Más allá de la carretera y por donde se alzan los famosos adosados se ubican los principales elementos patrimoniales del pueblo, como la vieja Casa del Obispo, bello edificio aragonés que hace de ayuntamiento. También la iglesia de San Julián, vieja capilla gótica edificada casi por completo en ladrillo y aprovechando la ubicación de la desaparecida fortaleza de Nuévalos, cuya torre aún permanece junto a algunos restos de sus muros.
© 2017 Jaime Tello García
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Para facilitar las tareas de desescombro de las casas quue se derruian, con los restos se llenaron todas las bodegas que se extendian por el subsuelo. Esa fue tambien otra perdida irreparable.
Definitivamente el pueblo perdio parte de su esencia y eso es lo que mucho de sus vecinos han lamentado a posteriori.
Con el correr de los años Nuevalos se ha convertido en un pueblo que cuenta con equipamientos turisticos y de servicios envidiable que no tiene parangon en pueblos de menos de quinientos habitantes de toda España.
Qienes lo conocemos y amamos lo consideramos como un pblueblo singular cuyo valor se incrementaria hasta el infinitivo si se hubiera podido mantener su casco antiguo.
De este desaguisado hay mucho que decir.
las casas fueron expropiadas con la contruccion del pantano en los sesenta por lo que sus propietarios ( con alguna excepción) las abandonaron y como tal estuvieron hasta mediados de los ochenta .
En esos años se deterioraron y su recuperacion se hizo imposible. En un momento determinado a finales de los setenta la Confederacion Hidrografica del Ebro ( CHE) y que era en nombre del Estado tiular de la propiedad, de la que se habia desentendido por completo, revertio la propiedad al Ayuntamiento que evidentemente no podia acometer la recuperación- rehabilitacion del antiguo casco del pueblo viejo.
A partir de aqui y en poco tiempo tras consulta a los antiguos propietarios y a todos los vecinos, desde el ayuntamiento, con intervencion de agentes externos e internos ( Un notario, y otros asesores) se creo una coperativa y se decidio tirar las casas y levantar la actual urbanizacion en el espacio que ocuparon las antiguas casas.