Urex de Medinaceli (Soria)

UREX DE MEDINACELI
Llegué a Urex sin saber nada del pueblo, siguiendo la indicación de una vieja señal de carretera que conducía hacia un topónimo extraño marcado por la "x" final. Comencé a pasear por las calles de su reducido casco urbano y empecé a ver cosas raras. Intervenciones artísticas aquí y allá. ¿Qué sería todo aquello?. Las prisas y la ausencia de persona alguna a la que interrogar en el mismo pueblo hicieron que me largara de allí sin una respuesta, que obtuve aquel mismo día al llegar a casa. Por lo visto, un grupo de artistas encontraron en Urex el espacio y la calma adecuadas para sus encuentros que hasta donde yo sé, celebraron en 2016 su séptima edición. Y de paso con sus obras adornan sus fachadas rompiendo el recio carácter castellano de sus calles, con una exposición permanente que entretiene al visitante y enriquece la vida de sus escasos vecinos de toda la vida. Por lo demás, Urex es tan pequeño que no cuenta con ayuntamiento, pertenece al de Arcos de Jalón. Su poblamiento es antiguo, y su topónimo parece indicar la presencia de "aguas claras" que, abundantes, regaron y riegan la huerta y la arboleda que se extiende a los pies del pueblo. La Vega del Río Blanco, que así se llama el curso de agua, y el viaducto del AVE determinan el paisaje que abriga a Urex, por lo demás postal kárstica, áspera y desabrigada en la zona cero del despoblamiento español. La Iglesia de San Bernabé ocupa el centro del pueblo, templo discreto de tosca espadaña frente al que se abre una amplia plaza, principal espacio de encuentro. Paseo por las calles desiertas del pueblo y pienso en cómo debió ser el choque entre los vecinos de Urex y los artistas recién llegados. ¿Sería un encuentro amistoso o cargado de desconfianza?.
© 2017 Jaime Tello García